El momento en que los hijos se preparan para sacarse el carné de conducir puede ser emocionante y, a la vez, un nuevo foco de preocupación para los padres. Según la American Academy of Pediatrics (AAP), los accidentes de tráfico son la principal causa de muerte entre adolescentes y adultos, por ello, ofrece recomendaciones clave para que los padres puedan guiar a sus hijos en este emocionante proceso y ayudarles a evitar riesgos innecesarios en la carretera.
Pautas para evitar que tu hijo tenga problemas al volante:
- 1. Ser un buen ejemplo es el primer paso: utilizar siempre el cinturón de seguridad, no distraerse con el móvil y respetar los límites de velocidad son prácticas que los adolescentes imitarán si las ven reflejadas en sus padres.
- 2. Establecer reglas claras desde el principio: durante los primeros meses tras obtener el permiso, el riesgo de sufrir un accidente es mayor. Por esta razón, los padres deben establecer reglas claras y específicas sobre el uso del coche. Limitar el número de pasajeros y evitar la conducción nocturna.
- 3. Castigar de manera proporcionada a la gravedad de las infracciones: si un adolescente conduce de forma imprudente o bajo los efectos del alcohol, la sanción debe ser severa, como no dejarle conducir durante una temporada. Es esencial que los padres dejen claro a sus hijos que el respeto por las normas de tráfico no es negociable.
- 4. La supervisión es esencial: los padres tienen que supervisar la conducción de sus hijos cuando consiguen el carnet. Es recomendable que se aseguren de que sus hijos saben manejarse en la conducción en todo tipo de condiciones, incluidas la noche y el mal tiempo.
- 5. Proporcionar un coche en buenas condiciones: garantizar que el vehículo que conducirá el adolescente esté en óptimas condiciones es otro aspecto clave. Los expertos sugieren que los padres ayuden a sus hijos a revisar el estado de seguridad del coche y se aseguren de que cuenta con cinturones de seguridad funcionales y que el vehículo ha pasado todas las revisiones técnicas necesarias.
Conseguir el carné de conducir es un paso muy importante hacia la independencia para muchos adolescentes, pero también conlleva riesgos considerables, por lo tanto, requiere actuar con responsabilidad. Los padres pueden desempeñar un papel fundamental en garantizar que sus hijos estén preparados para enfrentar la carretera con seguridad. Con una supervisión activa, reglas claras y un buen ejemplo, el proceso de aprender a conducir puede ser mucho más seguro y menos estresante tanto para los adolescentes como para sus familias. Un gran poder conlleva una gran responsabilidad.
Autor: Nuria Virginia Martín