Somos muchos los que este verano decidimos viajar con nuestras mascotas. Lo habitual es hacer traslados cortos pero, en vacaciones los trayectos suelen ser más largos y esto requiere tener en cuenta más factores: seguro, adecuación del vehículo, necesidades de nuestros animales, etcétera.
Según el informe “2021 Animales de compañía y Seguridad Vial” presentado por RACE y Royal Canin los datos que reflejan cómo los españoles plantean la seguridad de sus mascotas a la hora de viajar, y recoge también consejos para garantizar el bienestar de las mascotas durante los viajes, detalles de la legislación vigente, y la incidencia de los animales en los accidentes.
El riesgo de llevar a tu mascota suelta
Cuando un coche va circulando a una velocidad de 50 km/h, los ocupantes y los objetos que van dentro del vehículo se mueven también a la misma velocidad en el caso de impacto. Esto significa que un perro de 20 kg de peso tendrá una carga de impacto que superará la media tonelada, lo cual es una carga adicional para los pasajeros del vehículo y puede reducir o anular la protección de sistemas de seguridad, como asientos, cinturones de seguridad o airbags.
Consejos veterinarios
Estas son algunas de las recomendaciones que, veterinarios consultados por la Dirección General de Tráfico, comparten con los conductores que van a viajar con mascotas en sus vehículos.
- En caso de desplazamiento consulta con el veterinario sobre las condiciones especiales que puede tener la zona de destino, ya que podría necesitar vacunar a su animal o llevar algún documento adicional de salud.
- Antes de un viaje, adecúa la alimentación del animal y llegado el momento lleve consigo su comida habitual para evitar problemas digestivos.
- Prepara “la maleta de la mascota”, en la que debes incluir la documentación y la cartilla de vacunaciones al día, así como todas las cosas que pueda necesitar en su nueva ubicación (bebedero, comedero, cepillo, cortauñas, juguetes, etc.)
- Acostumbra a tu mascota desde los primeros meses de vida a viajar con un sistema de retención y antes de sacarlo del vehículo, en el caso de los perros, sujétalo siempre con la correa, vigilando el entorno para no poner en riesgo ni al animal ni al resto de usuarios.
- Según los resultados de los crash test realizados por el RACE, dentro del coche, el mejor lugar para ubicar el transportín es en el suelo, entre el asiento delantero y trasero, y siempre evitando el sol directo.
- Los perros pueden viajar separados del habitáculo general por redes o barras metálicas (nunca hasta el suelo del maletero) o con un arnés homologado con doble anclaje en el asiento posterior del coche, evitando en todo caso que interfiera con el conductor.
- Realiza paradas frecuentes cuando viajes en coche con tu animal de compañía, imprescindibles para que pueda beber agua fresca y pasear, así como hacer sus necesidades (en el caso de los gatos podemos dejarles salir del transportín dentro del coche para que estiren las patas y beban, si lo desean).
- Durante las paradas, nunca dejes a tu mascota sola en el interior del vehículo con las ventanas cerradas, sobre todo en zonas con altas temperaturas y al sol. El resultado puede ser fatal.
- Supervisa en todo momento el estado del animal, y ante cualquier síntoma anómalo, contacta con un veterinario.
Recuerda limpiar el transportín antes y después de cada uso, evitando suciedad o la presencia de hongos como consecuencia de la humedad.
¿Tienes un seguro adecuado?
Desde la DGT recuerdan además, la importancia de tener un seguro específico. Y es que la mejor manera de estar cubierto ante cualquier incidente en el que se vea envuelto nuestro animal, por ejemplo, ante la irrupción del perro o el gato en una vía al perder su control, es mediante un seguro. En este sentido, el 58% de los dueños reconocen disponer de un seguro de responsabilidad civil para mascotas. La legislación vigente obliga a suscribir un seguro de Responsabilidad Civil por daño a terceros con una cobertura no inferior a 120.000 euros para los dueños de animales potencialmente peligrosos. También es importante consultar la normativa vigente en cada Comunidad Autónoma sobre la obligatoriedad de tener un seguro de responsabilidad civil, aunque el animal no sea potencialmente peligroso. Recordamos que no disponer de esta cobertura está tipificada como infracción leve.